Protección solar para bebés y niños
¿Te has preguntado alguna vez si tu bebé debe usar protector solar? Uno pensaría que dado que son pieles muy sensibles los rayos podrían afectarles con mayor facilidad.
En este artículo conocerás de qué manera podemos cuidar la piel de nuestros pequeños de acuerdo a su edad.
Menores de 6 meses
La FDA y la Academia Americana de Pediatría (AAP por sus siglas en inglés) recomiendan mantener a los recién nacidos y menores de 6 meses alejados de los rayos solares de manera directa. Esa es la mejor protección para ellos. Puedes colocarles bajo la sombrilla o debajo de la agradable sombra de un árbol. Especialmente durante esas horas del día donde el sol irradia con mayor intensidad.
Usar ropa adecuada como protección contra el sol
Se recomienda que se vista a los niños con pantalones largos y camisas largas de tela ligera, los pequeños también pueden llevar un sombrero que cubra lo suficiente para tapar sus orejas y cuello.
Además, para el bebé representa otro reto. Dado que ellos no sudan como los adultos, a su cuerpo aún le falta desarrollar por completo ese sistema de calentamiento y enfriamiento y por ello, corren un riesgo mayor de deshidratarse.
Mayores de 6 meses
Lo ideal sería que a partir de esta edad se coloque protección solar en los niños. Dado que la piel de estos menores es aún muy sensible deben usar protectores solares con fps de 50, además se debe limitar su exposición al sol. Los niños de 6 meses a 2 o 3 años deben usar fotoprotectores con filtros físicos, son los más recomendables para ellos, sin embargo no son cosméticamente tan aceptados, dado que dejan una capa blanquecina al usarse.
Cuando son mayores de 3 años ya se pueden usar protectores solares con filtros físicos, químicos o mixtos.
Sabemos que la piel de nuestros pequeños es sensible, lo mejor es ser observadores con lo que les colocamos para detectar posibles irritaciones.
Recuerda que los filtros evitan que la radiación solar dañe la piel.
Aquí te dejamos los tipos de filtros del fotoprotector:
- Filtros físicos. Su mecanismo de actuación consiste en reflejar la luz solar. Están compuestos por sustancias como el dióxido de titanio y el óxido de zinc. Son los más adecuados para los niños pequeños ya que penetran menos en la piel.
- Filtros químicos. Absorben la radiación ultravioleta. Pueden producir reacciones en la piel, como dermatitis.
- Mixtos. Combinan los dos tipos de filtros.
¿Quiénes son los más sensibles a desarrollar patologías por el sol?
- Los que tienen la piel blanca o muy clara (se queman con facilidad y casi nunca se ponen morenos). Suele tratarse de niños rubios o pelirrojos.
- Quienes presentan antecedentes familiares con alguna enfermedad en la piel.
- Los niños son sometidos a la exposición solar de manera frecuente durante los primeros años de su vida.
- Los que desarrollan lunares o pequitas con facilidad.
Y recuerda, los niños deben usar protección solar, no importa su color de piel. Todos son sensibles a quemaduras solares, enrojecimientos, y se exponen a desarrollar las mismas patologías.
Usa habitualmente protector solar con un FPS de 30 o superior y limita el tiempo de exposición al sol para reducir el riesgo de lesionar su piel. Es muy importante educar a nuestros pequeños sobre la importancia de protegerse adecuadamente del sol.